Dos recomendaciones que van a multiplicar tus resultados
Qué pesada soy.
Ando siempre en plan “abuela Cleta” con que “han cambiado mucho las cosas en el mercado laboral”, con que “ya no se puede buscar trabajo como se hacía hace 10 años” (de hecho hace tanto tiempo que lo digo, que ya son ya más bien 20 años!!).
Y cuando creo que ya está, ea, que ya se ha enterado todo el mundo, venga, ya lo tienen todos claro – ya no se van a limitar a mandar CVs por los agujeros negros de los portales de empleo, ya no van a mandar peticiones de contacto en Linkedin adosadas al famoso mensaje “te mando mi CV por si te enteras de algún proceso que encaje con mi perfil” -… la realidad me despierta de mi sueño.
La realidad, es que cada vez que hago la pregunta «¿Qué estrategia estás siguiendo en tu búsqueda?» me encuentro con lo mismo: que la gente no ha hecho la actualización de software, siguen en la versión 1.0 cuando el mercado está 10 versiones más allá.
Y me pregunto qué está pasando…
Se me ocurre que tal vez el problema sea que nosotros, los “expertos” hablamos y hablamos, y le sacamos punta a las cuestiones más académicas y usamos tantos términos acabados en -ing, que los candidatos, que ni sabéis ni os interesa hacer un máster en “Prosa y verso del desarrollo profesional”, resulta que no acabáis de pillar exactamente-en concreto-hoy-mismo-a-esta-hora, qué (demonios) tenéis que hacer en la práctica.
No problemo.
Pues aquí van en concreto y en la práctica dos cosas importantes que debes hacer.
[Ojo: esto no va a ser una actualización completa de software – esto es el primer paso, porque contártelo todo-todo-todo en un post sería más largo que un día sin pan, o sea que si quieres the whole enchilada y ya que te pones, quieres que yo te ayude personalmente, entonces mira >>AQUÍ ].
Y vamos allá con lo que esto debería suponer para ti en la práctica:
Uno: ¿qué pasaría si…?
Quiero que te plantees lo siguiente:
Si no existieran los portales de empleo, ¿qué harías para conseguir el trabajo que quieres?
Pues haz ESO. Así de simple.
Porque la realidad, la puritita realidad es que más del 80% de los trabajos no están en los portales de empleo, lo que significa que todo el tiempo que les dediques, te va a rendir entre nada y poco.
En la práctica, lo mejor que puedes hacer es cualquier cosa que no sea invertir (y perder) el tiempo en los portales de empleo. Verídico.
No es que no tengan ninguna función, porque la tienen, pero mucho más estratégica, mucho menos tiempo, y sólo en función de la fase profesional en la que te encuentres. Por tanto, por el momento, lo que debes hacer sin falta es:
Buscar qué otros caminos (que los hay, de hecho los tienes delante) te pueden llevar hasta tu trabajo ideal, que no sea sentarte a esperar a que salga una vacante en un portal de empleo.
Deben ser caminos donde tú proactivamente puedas todos los días hacer algo para avanzar, que no dependas de que alguien publique una oportunidad, y con los que tú puedas influir mucho más en el resultado final – y no estar como un autómata empapelando el agujero negro de los portales de empleo con tu CV.
¿Quieres ideas? >>AQUÍ y >>AQUÍ
DOS: ¿qué harías si…?
El número dos está directamente relacionado con el anterior: si la conclusión a la que has llegado al leer la primera recomendación es que uno de los caminos que te puede llevar al trabajo que quieres serán los contactos que puedas hacer, apúntate de premio un Gallifante 😉
Y como vivimos en la era de «intenné», te plantearás que esos contactos los puedes hacer, en gran medida, en las redes sociales – en especial, pero no únicamente, en Linkedin -.
Vale, pues aquí viene la segunda recomendación práctica para ti:
Cada vez que interactúes con alguien, quiero que te imagines que estás en la boda de unos amigos y esa persona es quien te ha tocado al lado durante la cena.
Tú no le conoces personalmente, pero ya que vais a pasar un rato juntos, ¿qué haces? Pues te presentarías, romperías el hielo, y buscarías temas de conversación que podáis tener en común, te interesarías por su profesión, o su empresa, o lo que te quiera contar. Escucharías. Serías educado, amable, humano.
Bien, pues cada contacto que vayas a hacer a través de la pantalla, igual, imagínate que está sentada/o a tu lado (o enfrente, como prefieras) y actúa como lo harías si fuera así.
El hecho de que dejes de interactuar de la manera robótica, distante y poco natural que hace todo el mundo y su primo cuando está delante del ordenador, te va a diferenciar, te va a hacer destacar y vas a ver como empiezas a tener respuestas que no te imaginas en este momento.
Hazme caso.
Pues aquí lo tienes: DOS cambios que puedes (y debes) empezar a aplicar ya para que no te pueda volver a decir que “no te enteras cómo han cambiado las cosas”.
Cuéntame en los comentarios si lo pones en marcha.
Y ya sabes: fuerza y valor!!!
P.s.: ¿Necesitas ayuda con esto y con el resto de pasos que debes dar para ser la persona elegida para ese trabajo que es tan importante para ti? Te puedo ayudar personalmente! ¿Cómo? Aquí te lo cuento: >>Grupos de Mentoría
Estoy deseando conocerte!!!!
Hola ML!!!!
Bueno, esta vez es de verdad: he puesto fecha de vencimiento recontra definitiva a mi profesión como profesor (marzo 2019). He aplazado esa fecha tantas veces que ni yo me creo que la voy a cumplir. Pero esta vez sí, y si no consigo nada, me las arreglaré como pueda (aunque tuviese que ser vendedor ambulante).
Me he propuesto en esta semana mandar 20 mails o mensajes a distintas personas que «medianamente» conozco, que podrían considerarse contactos, para iniciar una transición laboral dulce que me lleve hasta «la alternativa» (el Santo Grial), o bien, que esa actividad se termine transformando en ella.
Hasta ahora he mandado 3 mensajes (aún no me fijé si contestaron). Pero no sé si los abordo bien. Yo sé escribir muy bien, y trato de hacer buen storytelling, pero en general, cuando lo intenté en otro momento, hace unos años, no he obtenido respuesta.
Según he leído/escuchado, si te responden 1 de cada 10 o 20 personas, debería considerarse un éxito. Así que por eso me he propuesto enviarle a 20.
Pero para aumentar mi posibilidad de éxito, necesito una opinión externa experta (como la de una jobjedi muy talentosa….). Yo entiendo que muchas cosas no puedes hacer, María Luisa, pero sería genial tener una referencia mínima (ejemplo) para saber si uno lo está haciendo bien. Yo creo que sí, pero…
Ahora, el problema más importante, y para el que necesito(amos) ayuda: vamos a suponer que yo mando un mail requetelindo, y la persona que lo recibe, me contesta diciendo: «Qué historia tan interesante. Espero que sigas adelante en tu búsqueda. Suerte». ¿Por qué podría contestarme de ese modo? Porque no le estoy aportando valor. El GRAN asunto es que, en pleno proceso de reinvención laboral, no tengo demasiado que aportar! Voy a ingresar a un mundo en el que no tengo experiencia (aunque podría tener conocimientos), pero mi mayor valor es el «hambre de gloria». ¿Qué valor concreto puede aportar alguien así (como yo)? Porque los 3 mensajes que mandé tratan sobre mi situación laboral actual, mis ganas de destacarme y ser feliz aportando con mi trabajo y esfuerzo, y una pequeña muestra de lo que he hecho en relación al empleo de interés. ¿Con eso alcanza, María Luisa? ¿O le estoy errando mogollón?
Muchas gracias por tu respuesta.