Yo me arrastro sobre cristales rotos, ¿y tú?
Estas son algunas de las cosas que me han ocurrido las dos últimas semanas:
Me han insultado, escupido (digitalmente) y denigrado mi trabajo.
He acudido a la presentación de un pedazo de proyecto en el que tengo el honor de participar como colaboradora, en una empresita que tal vez conozcáis alguno: TELEFÓNICA (oh yeah! Este es el proyecto: Talentum Empleo)
He llorado a oscuras, en solitario, lágrimas de rabia y decepción. He pasado dos noches casi enteras en vela de preocupación y ansiedad.
Me han propuesto participar en un webinario que seguro será súper ameno y divertido con gente a la que aprecio y admiro mucho (este, por si os apetece verlo: Cibermaratón Marca Personal).
Hemos pasado un sustazo familiar que por un momento nos paró el corazón – pero gracias a Dios, *evoluciona favorablemente*.
Me han ofrecido por primera vez un dinero muy interesante por mis palabras escritas.
Me ha fallado una persona importante en un momento en que necesitaba su ayuda.
Me han ofrecido participar en un libro, escribir para ellos y hacer un webinario conjunto una empresa muy potente que es la última con la que yo esperaría colaborar. Sorpresas te da la vida. (No te voy a decir aún quienes son. Ya lo verás ;).
Dos semanas laborales, 14 días de montaña rusa. ¿Quieres aprender de inteligencia emocional? Hazte emprendedor.
Y en realidad he endulzado la lista, porque inicialmente iba a contarte sólo la parte amarga.
Mucha gente desde la atalaya de su éxito escribe libros y artículos sobre las dificultades y los errores de llegar hasta ahí. Y está bien. Pero yo, que aún no estoy en ninguna atalaya pero sí en pleno sufrimiento del día a día, te digo que «dificultad» es un eufemismo para decir: cristales rotos por los que te tienes que arrastrar para llegar donde quieres.
Hace tiempo que me di cuenta que cuando hablan de las dificultades y de las decisiones difíciles, no te terminan de contar las cosas como realmente son. Te cuentan versiones políticamente correctas. Te cuentan lo que estás dispuesto a escuchar.
Porque en realidad, la gente no quiere ver la sangre, no quiere saber exactamente lo que supone conseguir lo que quieres. Y mucho menos, hacerlo.
Si yo te cuento que cada vez que saco un producto a la venta tengo que borrar una media de 15 comentarios que me hacen públicamente del tipo:
“Qué poca vergüenza tienes, aprovecharte de la gente desempleada”.
“Qué morro tienes. Deberías cobrar 100€ máximo y GARANTIZAR a la gente que les vas a conseguir un trabajo si de verdad quieres ayudar”.
«Estoy hasta los *** de charlatanes y vendehumos que se aprovechan de la debilidad de la gente».
(Todos comentarios reales). ¿Qué te parece?
Uno muy *detalloso* me llamó “choni deslenguada y oportunista”. Vale, este es posible que fuera un trol.
Y a esos comentarios, súmale los “me gusta” que les van generosamente dando la razón otras amables personas.
Yo soy la primera que me quejo de las patéticas condiciones que nos imponen hacienda y seguridad social a los que nos decidimos a emprender. Pero muchas más cornás da la gente cuando después de años preparándote, de meses y meses y meses (y meses y meses) de trabajar sin ingresar ni un duro para lograr más experiencia, más conocimiento, más nivel profesional; cuando después de año y medio preparando un producto, incurriendo en miles y miles (y miles) de euros de gastos, dándole mil vueltas para que sea perfecto, añadiendo, mejorando, eliminando, puliendo, testeando…
… por fin das a luz a un producto que sabes que es la caña, que sabes que puede cambiar mucho la vida de la gente, con el que mucha gente ya ha logrado resultados, que sabes que puede marcar un antes y un después en la vida de los profesionales, que sabes la carga de cariño, de ilusión, de dedicación que has metido dentro… y vienen una serie de personas y le escupen en la cara, sin miramientos, sin la más mínima consideración por la persona -el emprendedor- que lo ha dado a luz y que se ha dejado la piel en el camino.
Esto no te lo cuenta nadie. Y esto es muy jodido.
Como tampoco te cuentan que cuando estás en el ojo del huracán del emprendimiento, con mil frentes abiertos, con enormes expectativas y penosos resultados, cuando tienes que dar un 859% de ti para que aquello tire, tienes que tomar decisiones muy desagradables y muy poco populares.
Un ejemplo: yo he reducido a una minimísima lista a la gente cuyas llamadas contesto y con la que me relaciono. Mi vida social es mínima. Los eventos a los que asisto son mínimos.
Y no voy a entrar en la cantidad de veces que mi pitufa adorable (6 años), me dice «mami juega conmigo» y yo le contesto «No, mami tiene que trabajar«. Se me hace una úlcera sangrante cada vez.
Muchos, en cambio, que no paran de quejarse del horror que es su trabajo, todos los días hablan varias veces con su madre, con sus hermanos, se mandan mensajes con sus 15 amigas, salen a desayunar su media horita diaria y se echan unas risas con los compañeros, hacen planes todas las semanas, quedan a comer con fulanito y menganita, mantienen largas conversaciones telefónicas a diario…
Y siguen en ese trabajo horrible, porque el precio de cambiarlo, son los cristales rotos y no están dispuestos a pagarlo.
Es que esto a la gente no le gusta saberlo. No le gusta saber que cuando quieres algo, tienes que tomar decisiones muy jodidas.
No de las de “Hay que ser perseverante”, “Si te caes 7 veces, levántate 8” “Hay que ser resiliente” y similares que son las políticamente correctas.
Nos encanta la morcilla, pero no queremos saber cómo se hace.
Por eso lo que nos cuentan son las respuestas pre-grabadas, políticamente correctas. No nos cuentan de verdad lo que supone llegar a tener éxito a cierto nivel.
Y así nos pasa, que queremos tener un trabajo coj**udo, queremos cobrar buen dinero, pero cuando llega el momento de arrastrarse por encima de los cristales rotos… reculamos, y volvemos a tirar de los portales de empleo.
Que ponerte a hacer contactos para conseguir algo a medio plazo es un petardo. Que ponerme a investigar las empresas, el mercado, ir a eventos o quedar con gente que no conozco, me da una pereza que me mata.
Que invertir dinero en que alguien que ya ha pasado por esto y sabe cómo lograr resultados, te lo enseñe (véase Aprende a Venderte, permítame que insista), es tirar el dinero.
Mejor espero a que mejoren las cosas, a que la mitad de la población activa se mude al país de Nunca Jamás, a que se me cruce un unicornio y la ley de la atracción me aparque mi propio Maserati Gran Cabrio MC Centennial Edition en la puerta.
Y así pasa un mes más y otro mes más. Y otro. Y otro. Y qué divertido es el juego de los portales de empleo, verdad? Es como si estuvieras jugando a las tragaperras…
Lo que no sabes es que las máquinas están trucadas. Que la banca siempre gana. Que no hay premio.
Que si quieres algo, tienes que pasar por cristales rotos.
Mª Luisa, a mi me parece muy generoso por tu parte compartir tus consejos (a los cuales estoy enganchada y comparto con mis amigos y contactos…) y me parece completamente licito que vendas tu servicios…y perfectamente coherente que te hayas lanzado al emprendimiento…asi que por favor…NI CASO…por favor, quedate con estos 55 comentarios de apoyo y de cariño que un mes más tarde..te siguen llegando…un abrazo
Mi querida María Luisa, tú ni siquiera creo que seas consciente de esto que te voy a contar. Mi primer post, fue un encargo que me hiciste para el proyecto «The Job Academy» hace ya años. Para mí supuso lanzarme al apasionante mundo de escribir en el mundo 2.0. Desde ese día hasta hoy, he caminado y camino como tú por cristales rotos pero he crecido personal y profesionalmente.
Esta pequeña anécdota te la cuento porque probablemente no sepas la cantidad de cambios que has generado en las personas y que las ha hecho mejorar. Esto, debe compensar esta otra parte de nuestro trabajo menos agradable.
Sigue brillando María Luisa y sigue mejorando vidas.
Un abrazo!!!
Mi querida Mª Luisa atravesar esos cristales rotos duele, marca pero también fortalece y te hacen crecer como persona. Esos cristales existen y es la cruda realidad que pocos saben o quieren saber: todo sueño transformado en proyecto requiere muchoooooooooooooo esfuerzo y demasiadossssssssssssssss sacrificios personales que muchos no son capaces de imaginar. Sacrificios en mayúsculas envueltos en horas interminables de trabajo por eso esos comentarios tan malintencionados dichos de forma gratuita y muchas veces desde el creído ‘anonimato’ que brinda Internet duelen como el corte de un afilado cristal pero aunque se pierda con esas heridas mucha sangre/energía emocional también se aprende y son enseñanzas que se cargan en la mochila vital pera seguir creciendo y luchando por tu proyecto, porque tú lo vales, porque eres una valiente y lo demuestras día a día.
Murphy aterrizó por tu casa el día del cibermaratón de marca personal para cortar con un cristal la parte tecnológica e impedir que disfrutáramos más de ti y tu experiencia, pero habrá nuevas ocasiones en las que Murphy no estará invitado, es más no le dejaremos entrar y a ti sí porque sabes que me encanta tu energía, me encantan tus valores, enseñanzas y consejos, en definitiva, me encanta contar con alguien tan valioso como tú.
Un grandísimo abrazo desde mi colección de cristales rotos que me han enseñado que los abrazos virtuales se agradecen un montón en momentos especiales hasta que llegue ese esperado abrazo físico.
Hola Maria Luisa,
El post me ha encantado y me ha dado mucha lástima que recibas tantos comentarios negativos. Es cierto lo que dices que hay muchas personas que hablan mal de lo que hacen otros por internet; en tu página/comentarios y en cualquier sitio que puedan. Suelen ser personas que no saben de lo que hablan, porque no conocen el programa o método o producto que critican y tampoco saben lo que dicen porque no calculan sus palabras. Así que en principio, piensas, no deberías tener que hacerle caso, en teoría ; pero cualquiera que haya sufrido ese tipo de situaciones sabe que desgastan y escuecen en la práctica. Así que te envío ánimo y te deseo que pases un fin de semana estupendo con tu niña!
Aparte, lo que me has descrito me ha recordado una escena del libro 1984, de George Orwell: los dos minutos de odio. Un momento en que todos los trabajadores se reunían ante unas pantallas unos dos minutos todos los días y gritaban e insultaban a las imágenes que salían en ella (imágenes de traidores al partido) ; así se liberaban de la angustia y la frustración que les causaba su vida mísera sin culpar al partido que era la verdadera causa de su miseria. Pues a veces me parece que internet funciona así: la gente que tiene problemas, ira o frustración se mete en internet y se desahoga pisando a todo el que brille, se esfuerce o demuestre el valor que ellos no tienen en vez de gastar esas energías en esforzarse ellos por avanzar.
Un saludo, guapa!
Querida Cobián,
Qué Máster es emprender! Cuánto se aprende! Se descubren cosas que no sabemos que tenemos dentro! Gracias Montoro and friends, gracias trols, gracias tronistas cibernéticos, gracias macarras de segunda, porque lo que no nos mata nos hace más fuertes.
Las (y los) que manejamos los platos chinos cada día, haciéndolos girar para que no s e paren, sabemos de lo que hablas. Y como tú no hay dos,querida. Más curranta y riquiña a la vez…¿dónde?…Sólo tú!!!
Besos from Vigo.
Hola María!!!!….. Me ha encantado tus post y sobre todo la parte donde aludes a esa gente que se queja de su trabajo pero tiene tiempo para el café, mandar mensajes y llamar a su madre…….. Genial!!!!.
Yo soy de esos que después de un despido, decidió por suerte o por desgracia trabajar para mí y lo hago desde casa con sus cosas buenas y malas y me consta que para muchos conocidos cercanos soy ese que está en casa tocándose las narices. Es duro este tipo de comentarios, pero no gasto energías en intentar hacerles ver que lucho para salir adelante, sería un tiempo muy valioso perdido.
Muchas gracias por tus post inspiradores, que sigas teniendo cristales rotos en su justa medida porque seguro te harán más fuerte!!!!.
Un abrazo!!!!
Hola:
Pensaba en los comentarios desagradables que te hacen a veces y estate segura de que los que critican que cobres por tu trabajo no tienen escrúpulos a la hora de pagar una suscripción a equipos de fútbol, o gastarse el sueldo en salidas nocturnas, etc etc. Y no lo digo porque estas cosas sean malas sino porque la ignorancia y la desfachatez a veces dejan a uno sin capacidad de reacción inmediata.
Muchos aún no saben lo que cuesta formarse, las renuncias que hay que hacer para saber de algo, justo porque no lo ponen en práctica apenas nada…o porque están acostumbrados a que todo sea gratuito, o por lo que sea …
Pienso en el vicio de Occidente, en la pobreza de los refugiados, en la tortura de miles de seres humanos a diario. Pienso que vivimos en una sociedad egoísta y desagradecida, tonta de todo…que piensa que no tener trabajo es el fin del mundo…Peor es no tener esperanza…
Así que bonita, mírate al espejo y quédate tranquila porque tú pones algo más que un granito de arena y que les den a los que no saben valorar lo bueno.
Un abrazo y fuerza y valor para ti esta vez.
Me encanta la gente como tú, la que habla claro y dice las cosas como son. Con sus puntos y sus comas.
Es imposible gustar a todos, esa frase la llevo clavada en mi mente, es mas considero que esa en la mejor de las diferencias, ser como somos y expresar lo que sentimos y como nos sentimos en determinados momentos, cuando intentas levantarte y luchar y te tiran al suelo una y otra vez.
Sigue así, tus post son cada vez mejores!!
Claro, bien clarito este post. Totalmente de acuerdo.
Experimento ese «nos encanta la morcilla, pero no queremos saber cómo se hace» a menudo en personas interesadas en sesiones de coaching. Quieren tener éxito, cambiar de trabajo, quieren cambiar creencias y limitaciones, quieren mejorar sus relaciones, etc, y cuando llega el momento no valoran el esfuerzo y la constancia necesaria para llegar a dónde quieren llegar y entonces, en vez de mirarse hacia dentro, miran hacia fuera (que es más fácil) y sueltan algunas barbaridades.
Ánimos y feliz miércoles!!
Por cierto me quedé con ganas de escucharte más en la Cibermaratón de marca personal.
Espero que haya una segunda vez!
Hola, María Luisa:
Buff ¡menudo post! No puedo decirte «te entiendo, se por lo que estás pasando» porque no soy empresario. Tengo la suerte de tener un trabajo «para toda la vida» que me gusta que es ser profesor de formación profesional. Sabes que tengo que orientar también a mis alumnos en su futuro profesional tanto como trabajadores por cuenta ajena como presentándoles la posibilidad de montar su propia empresa. Les recomiendo que lean tu blog porque no me gustan los «vendehumos» y se que tu no eres de esos y a veces tengo miedo de caer en ese discurso fácil.
Pero si que me he sentido algo identificado con eso de «más cornás da la gente». La semana pasada hice una dinámica de http://www.ypdgroup.com/ en la que les enseñaba a mis alumnos a hacer malabares con tres pelotas. Lo grabamos y fui enseñándoselo a mis compañeros con algo de reparo, tengo que reconocer. «¿Hacéis eso en clase, para qué?» «Pues para enseñarles a gestionar la frustración que con el emprendimiento se lo van a encontrar» Casi todos respondieron bien pero hubo un comentario que me llamó la atención por reiterativo «Pues eso no se lo enseñes a Fulanito que le da algo» Siempre hay alguien que desprecia tu trabajo para «apreciarse» el. Y, si, a veces dan ganas de abandonar porque, en mi caso, todo esto es por amor al arte. Pero al final seguimos porque creemos que podemos ayudar a alguien, mis alumnos o tus clientes.
Te dejo un enlace a la entrada del blog de clase donde comento la experiencia por si lo quieres leer y verme haciendo malabares https://sites.google.com/site/salva20simulacionempresarial/dinamicas-ypd/jugglingmanagement
Un abrazo
De verdad hay gente que puede hacer todo eso?
«Muchos, en cambio, que no paran de quejarse del horror que es su trabajo, todos los días hablan varias veces con su madre, con sus hermanos, se mandan mensajes con sus 15 amigas, salen a desayunar su media horita diaria y se echan unas risas con los compañeros, hacen planes todas las semanas, quedan a comer con fulanito y menganita, mantienen largas conversaciones telefónicas a diario… ».
De qué se quejan?
Qué pena me ha dado leer este post…claro que todo el mundo sabe el esfuerzo que supone mantenerse a uno mismo, lo de la suerte no se lo cree nadie. Y a los Criticones…me da vergüenza compartir con ellos nacionalidad. Deberían aprender cómo gestionan la crítica constructiva en otras culturas. Digno de admirar.
Pero como no hay mal que por bien no venga, por qué no un post de «como gestionar tus opiniones sin ofender al personal?» 😉
Mucho ánimo que seguro que somos muchos más los que admiramos tu trabajo.
No puedo estar más de acuerdo, me dedico a los RRHH y en concreto a la selección de personal; son muchos los que vienen, se quejan de la situación, de los políticos, te dejan el Curriculum diciendo que por favor que están desesperados y que necesitan cualquier cosa para llevar un dinero a casa y cuando les llamas… no vienen a la entrevista, no se presentan en el puesto, no contestan el teléfono… Todo ellos conforman este grupo de «quejicas constantes», repartiendo mala energía entre los que intentamos sobrellevar la vida lo mejor posible…
Estoy totalmente de acuerdo con tus palabras, ojalá no les hicieras caso, porque seguro que somos más los que te deseamos lo mejor y entendemos lo que hay detrás de tu trabajo.. pero creo que no es posible no escuchar a estos… porque es difícil luchar contra un frustrado vital, siempre salen ganando en lo de dar por el …
En fin.. que me irrito, porque veo a diario esta situación, así que sólo desearte un buen día, que juegues con tu ángel, que escribas mucho y te paguen el doble, y que sigas trabajando en lo que te gusta, porque ellos nunca podrán hacerlo. 🙂
Son bestiales los ejemplos que compartes, Belén. No sabes cómo te lo agradezco porque eso es justo de lo que hablo.
Ya lo comentaba antes, pero a mí algo que me pasa súper a menudo es gente que me escribe pidiéndome algo (consejo, un descuento, una recomendación, una sugerencia, ayuda para tomar una decisión…), a quienes contesto con todas mis ganas de aportar… y nunca me escriben de vuelta para darme las gracias. No me quita las ganas de seguir contestando, porque por cada uno de éstos, el siguiente en cambio es una persona amable, agradecida y que aprovecha lo que le doy.
Pero por desgracia, hacen mucho ruido los que tanto se quejan pero cuando les pones la solución delante, siempre tienen alguna buena excusa para no hacer NADA.
Gracias por acompañarme y por compartir. Me encantará que me cuentes más, seguro que tienes mucho guardado en tu «memoria histórica». Si te apetece escribirme y contarme más, estoy en [email protected]
Un abrazo enorme!!!
Gracias por contestar 🙂 ya te conté mi vida un poco en un mail al que muy amablemente contestaste. Yo sigo buscando mi «grial», seguiré compartiendo cosas contigo, al final ya me dijiste que tu vida laboral y la mía habían sido similares, veo que son similares porque en el fondo en cuanto a valores también lo somos.
Seguimos en contacto 🙂
Pues solamente unas pocas líneas para enviarte todo mi ánimo y mi apoyo hacia tí…
A través de mi web, y por lo que supone de «exponerse» online y vaciarse muchos días públicamente, sé de sobra tb lo que es no solamente caminar sobre cristales rotos, sino lo que es que intenten romperte toda tu «cristalería» entera, escudándose en el anonimato de las redes sociales…
Que se le va a hacer…hay gente tan pobre tan pobre que solamente tiene tiempo de criticar y tratar de hacer daño a los demás.
Y para contrarrestar, y como de vez en cuando viene bien una palmada en la espalda, recalcarte que vales mucho,felicitarte por tu labor y por tu trabajo…y (para sacarte una sonrisa y con respeto…) que de «choni» nada, que sales bien guapa y elegante delante de la cámara durante muchos minutos, tarea que no es nada fácil de aguantar ni de dar el tipo con aplomo e inspirando confianza…
Lo dicho: ni caso. Ocuparse en lo nuestro en vez de preocuparse por lo ajeno…
Saludos, suerte y adelante.
Gonzalo
@gonzalogermj
jajajaja! pues gracias por el piropo, Gonzalo 🙂 Doy fe lo difícil que es aguantar el tipo delante de la cámara. Sigo sin acostubrarme!!!
Gracias por tus palabras, un lujo contar con tu apoyo.
Excelente comentario Maria Luisa, mucho animo!!
Las personas que te critican y te hacen malos comentarios es porque te tienen envidia, ignóralos y sigue adelante, somos mas los que te apoyamos . Gracias por ser tan sincera con nosotros y contarnos las cosas tal cual son. como dices tu Fuerza y Valor 🙂
Gracias, Silvia!
Tengo claro que no es mi obligación gustar a todo el mundo ni mi problema lo que los demás quieran pensar de mí. Lo que no deja de sorprenderme es toda la gente que hace de su vida una queja hasta el punto que termina sufriendo Síndrome de Estocolmo de su propia queja…
Gracias por escribirme y un abrazo muy grande!!!
María Luisa, no he podido evitar escribirte.
Ya sabes que me siento muy identificada contigo y que desde el otro lado de la pantalla me has ayudado altruistamente.
De personas como tú aprendo y tomo fuerza (y valor, como tu mensaje) para seguir adelante por conseguir mi meta profesional. Gracias a apostar por luchar en un camino nada fácil y decidir ayudar a otros a través de mi experiencia he encontrado trabajo, un trabajo nada fácil pero que me acerca a mi pasión y por el que me esfuerzo cada día. Esto, en parte, es gracias a TI.
Quédate con eso, quédate en cómo inspiras a la gente como yo, aquellos que estamos dispuestos a pelear por lo que queremos, porque aquellos que se quedan en el sofá lamentándose y criticando a personas como tú…Ellos, ellos no son los que deben importarte.
Hace falta valientes como tú y generosos como tú que nos ayuden a conseguir nuestros sueños, eso sí, trabajando duro. Yo tampoco creo en unicornios y hadas rosas 😉
Un abrazo
No sabes qué alegría me das!!!! Preciosas palabras que te agradezco enormemente.
No soy especialmente valiente, la verdad, pero sí tengo mucha motivación por hacer algo que importe en esta vida y por sentirme orgullosa de mi trabajo. Eso es mi motor.
Enhorabuena por ese trabajo y por ese espíritu!!!!
Un abrazo muy grande.
Gracias en verdad María Luisa
Sabemos bien que la comida no cae del cielo, siempre hay que salir a buscarla, las personas que como tu siempre buscan el bien común, salen airosas y en verdad en lo referente a la resiliencia tu eres un ejemplo vivo del mismo.
Gracias por todos tus aportes que crean conciencia y sentido.
Gaby
desde Mi Bello México
Gabriela, qué gusto me da que me escribas!!
Gracias por tus palabras, me dan mucha alegría.
Y que viva México!!!
Un abrazo enorme! 🙂
Fantástico post, como siempre, dices verdades como puños.
Admiro tu capacidad de transmitir las ideas, conceptos, pensamientos, … con ese lenguaje tan fresco, dinámico y cercano.
Seguro que tu proyecto «Aprende a verderte» va a ir muy bien, es un elemento clave en la mejora de la empleabilidad.
Con respecto a los «malos» comentarios, que te puedo decir:
Hay gente para todo y la envidia es un mal muy extendido….
Lástima que lo de «trabajar duro» para conseguir tus objetivos, metas, FELICIDAD, …etc. no sea contagioso 😉
Saludos
Gracias por tan bonitas palabras, Auxiliadora!
Yo también espero que el proyecto vaya bien – SÉ que le irá bien a quien se apunte, lo importante es que la gente se dé cuenta de cuánto necesita que alguien les cuente cómo tienen que hacer las cosas y lo que deben cambiar, porque lo que están haciendo NO FUNCIONA.
Gracias de verdad por compartir tu comentario conmigo.
Un abrazo enorme!
Meryluise Meryluise …. sólo puedo decirte, parafraseando a Theilard de Chardin (mola la pose cultureta eh!) que la creación en una obra inacabada…. y (añado yo) los pocos que lo sabemos sufrimos mucho al resto (pose elitistaquetecagas, pero realcomolavidamisma). Pero lo sufrimos con optimismo, porque sabemos que esto es una obra incabada y que cuando se acabe (some day, some where) va a ser la leche en polvo (si he puesto muchos palabros, me borras el comentario, no pasa na ni na).
Frente a toda esa gente tan triste y tan limitada, yo sí puedo decir BIEN ALTO PARA QUE SE ME OIGA EN TODO EL UNIVERSE, que tú Programa Profesional me ha hecho analizar mi vida profesional con un enfoque mucho más estratégico, que por ello he conseguido eliminar el factor miedo casi del todo, y el factor pánico al 100%, que he aprendido un método de seguimiento que me hace levantarme todas las mañanas con las pilas puestas, y que tengo claro que el futuro va a ser perfecto para mí, porque va a ser lo que yo quiera. Y ahora que estoy en paro de nuevo, en vez de sentir que mi vida entera ha sido una equivocación y hundirme por ello cada día un poco más, que es lo que pasó la vez anterior, he puesto en marcha una estrategia y disfruto todos los días de pensando todas las cosas que he conseguido y todas las que voy a conseguir, y al final del día reviso los pasos que he dado y me reseteo para el día siguiente. Porque lo bueno es que CADA DÍA ES UNA NUEVA OPORTUNIDAD, y sentir eso de verdad es mágico y lo he aprendido de tu mano. Y sobre todo me emociono visualizándome el sitio al que quiero llegar…. De vez en cuando me entra un bajón, no te digo que no, pero lo supero con la metodología que nos has enseñado y rodeándome de la gente adecuada.
Yo tengo una ventaja, lo sé, y es que a mí hacer contactos me chifla, porque pienso la mayoría de la gente es maravillosa. Aunque como género humano dejemos mucho que desear, tratas a los especímenes de uno en uno y, oye, te llevas muy gratas sorpresas. Todos llevamos nuestra mochila particular, y cuando conoces las de los demás siempre aprendes algo. Y si surge alguien que te escupe o que sólo te aporta cosas negativas, pues pasamos palabra y ya está, él se lo pierde, y además con una sonrisa para que le fastidie más y tratándole como si no pasara nada para que se reconcoma. No es fácil, pero tú sabes bien que practicando y entrenando se consigue casi todo.
Para que te rías te diré que leyendo tu post ME HE CLAVADO EL BOLI EN EL PÁRPADO DERECHO, y me ha salido un moratón muy artístico. La solución la tengo clara: hielo y pintarme el otro ojo con sombra morada. Es totalmente cierto lo que te estoy contando, pero asumo que ha sido por mi torpeza y mi frenetismo… no voy a pedirte daños y perjuicios. Dont worry.
Ánimo my friend, la FUERZA nos acompaña.
Primero he soltado dos buenos lagrimones. Luego casi me caigo de la silla de la carcajada.
Eres única, mi querida y especialísima Laly. Tengo que quererte porque es imposible conocerte y no sentirse inmediatamente atrapado por tu persona, tu forma de ser, tu generosidad, tu ilusión, tu ENERGÍA.
Sólo por que me sigas regalando estos comentarios que me ponen el corazón a mil, seguiré escribiendo.
GRACIAS!!! Eres mi Zumer-amiga 🙂 🙂 🙂 🙂
p.s.: corriendo voy a usar este pedazo de testimonio en mi página de ventas del POP, que lo sepas!!!!
Nadie triunfa en esta vida sin trabajar, y nada en la vida es cuestión de suerte ni del destino, eso como diría Paco Alcaide es la excusa de los mediocres… Cuando se brilla a través del esfuerzo, el tesón y la valía aparece esa envidia que lodo lo corroe y empaña… A ellos, a los que menosprecian tu trabajo les digo desde aquí, que para criticar antes hay que hacer y demostrar lo que uno vale, y nena… Tu vales mucho no, muchísimo.
Ni caso, sigue en tu empeño y te deseo el mayor de los éxitos con ese nuevo producto que has lanzado, que es bueno, innovador, de calidad y que además, puede ser clave para el desarrollo y avance de muchas personas.
Quienes te conocemos y te valoramos vamos a estar siempre a tu lado, cómo tu haces con nosotros. Un abrazo apretado María Luisa 😉
Querida Eva,
Para mí el mayor honor es poder decirte AMIGA porque que sepa todo el mundo que eres de las MEJORES personas con las que he tenido la enorme suerte de cruzarme gracias a este maravilloso 2.0.
Eres todo corazón, generosa, cercana, auténtica, amable. No te vayas nunca lejos, porque como dicen que uno es el reflejo de la gente con la que se relaciona, yo quiero que se me pegue aunque sea por ósmosis un poquito de ti 😉 😉 😉
Gracias por tu apoyo, que me llena el corazón y me llena de orgullo.
Un beso tamaño XXXXXXL
Aloha!
Un post súper realista y muy honesto en un mundo tan hipócrita. Por supuesto que es doloroso, Salir fuera de la zona de confort cuesta y vaya si cuesta! Pero solo Maria Luisa por tu entusiasmo y la verdadera ayuda que nos ( y eso que aun ni he empezado.. ;)) das MERECE LA PENA tu magnífico trabajo.
Fuerza y valor!
Iciar
Jo, me llega especialmente tu comentario porque eres una de mis Zumers y eso me llena el corazón!!!!!!
Gracias de verdad por tu apoyo y tus palabras, Icíar. Me encanta!!!
Un abrazo enorme!!!
Ánimo María Luisa!!!.
Y gracias por contar la verdad. Confirma tu valentía y le da más valor a tu trabajo, si cabe.
Ya sabes que no puedes contentar a todos. Admitamos discrepancias, pero no perdamos ni un minuto en los maleducados…ellos mismos se «eliminan del juego».
Cuando los encuentres, solo piensa en los que sí creemos en ti y sabemos que tu oferta SÍ ES ÚTIL.
VAMOS!!!.
Ole!!!!! un lujazo contar con tanto apoyo!! Si fuera canjeable, ya me podía retirar 🙂 🙂
Claro que pienso en toda la gente a quien le está sirviendo y cambiando la vida mi trabajo -tengo la enorme suerte de que además son generosos y luego me escriben y me lo cuentan. Y eso es lo que me importa.
Mil gracias por pasarte y dejarme tus palabras.
Un abrazo!!!!
Seguro que los demagogos que te hacen esas críticas gastan su dinero en otras cosas sin importancia. Tienes toda la razón. El que critique al emprendedor que intente emprender. La triste realidad es que la mayoría de la gente no valora el esfuerzo. No creo que sea tu mejor post, sí el más directo y desgarrador. Saludos
Olivia, me has leído el pensamiento y me has dado una alegría enorme con tu comentario.
«Gastan su dinero en otras cosas» – ahí le has dado. Ojo que no estoy diciendo que nadie tenga que comprarme a mí, y te aseguro que no quiero como cliente a alguien que tuviera tan poco nivel humano 😉 pero a lo que voy es que decir que el dinero es el problema no es más que una EXCUSA.
Y me he llevado una alegría enorme porque esperaba que se entendiera que esa es la moraleja del post.
No pretendía dar pena – y eso que agradezco muchísimo el apoyo, pero me limitaba a constatar algo que le pasa a todo el que lucha por lo que quiere y que yo he aprendido a asumir (lo cual no quita para que escueza, por supuesto)-, sino poner de manifiesto que de nada sirve quejarse y quejarse y quejarse pero luego no hacer NADA.
¿Que cuesta? cristales rotos, cuesta.
Y si no estás dispuesto a pasar por ellos, deja de intoxicar el entorno y a ti mismo con tanta queja, y deja de ponerle la zancadilla a quienes sí están dispuestos a pagar ese precio.
No sabes la cantidad de gente que me escribe contándome la situación tan difícil en la que está pero para pedirme que le recomiende un máster. Eso sí que es dinero, pero hacer un máster es una huida hacia adelante. No son cristales rotos, es sólo un paso más en la procrastinación vital…
Gracias de verdad por pasarte y dejarme tu opinión.
Espero que nos sigamos leyendo!
Ay María Luisa, no sabes como te entiendo.
Estas dos últimas semanas he tenido un vaivén emocional brutal, por un tema familiar que todavía no está resuelto. Soy autónoma y si me gusta la «libertad » de que dispongo, muchas veces siento una inmensa soledad.
Esos cristales rotos nos hacen más fuertes y mejores personas y hace que desarrollemos unas cualidades y fortalezas que ya me gustaría a mi ponerlas en mi CV o carta de presentación.
Haces un trabajo fantástico, increible, tienes una capacidad de comunicación brutal y una energía enorme. Sigue así.
Elena: lo primero, siento que estés pasando un mal trago. Espero que pase pronto, y lo mejor posible.
Lo segundo, no puedo estar más de acuerdo con lo que dices. Es un crecimiento personal que sólo se puede adquirir de esta manera. Y todo lo que ayuda a CRECER (no a deprimirse, a sufrir en balde, a vivir enfangado de victimismo), vale la pena al final.
Y tercero: mil gracias por tus palabras y por tu apoyo.
Tú también sigue así!
Hola a todos!
Ay María, ni caso. A mi me encantaría apuntarme a tu programa pero ni aun siendo «curranta» me puedo permitir su precio. Pero una cosa es eso y otra desprestigiarlo por ello. ¿Aprovecharse? Si cuelgas consejos muy buenos gratis todas las semanas.
Esto es como los que compramos vestidos en ebay a los chinos, que en la foto son preciosos, valen 4 duros y cuando llegan a casa nos llevamos el chasco.
lo bueno vale pasta y el dinero del pobre va dos veces al mercado, al igual que «al miserable y al pobre, todo le cuesta doble».
Entiendo que alguien en paro o con un trabajo precario no puede gastar ese dinero en el curso, y es una pena pero es lo que hay.
Volviendo a la analogía con la ropa, a mi me gustaría tener un armario estupendo, lleno de prendas que combinen para cada ocasión y en buen estado. Pero para eso se necesita dinero. Por lo menos si queremos el armario lleno de golpe. Pero si no tenemos ese dinero, podemos construirlo poco a poco. Unas prendas de destockaje o de esas de segunda mano que parecen nuevas…y poco a poco se consigue.
Pero eso lleva tiempo y trabajo. Y la cultura del consumo inmediato nos ha hecho olvidar como trabajar poco a poco, con tesón y paciencia.
ojalá algún día mi precario sueldo de mi trabajo alimenticio me permita hacer algún curso!!! De momento sólo puedo leer tus post, que son mis «prendas de segunda mano» 😉
Hola Lau y mil gracias por pasarte y dejarme tu comentario!!!!
Ojalá un día me pueda dedicar a regalar todo mi tiempo. De verdad. Y ya lo hago hasta donde puedo con todos los contenidos que aporto gratis, hago vídeos, he montado un mini-training para este lanzamiento…
Y no sólo eso: lo que no cuento son las decenas de mensajes que recibo A DIARIO de gente que pide mi consejo, mi recomendación, que mire su CV, que le dé mi opinión sobre algo, que le ayude a tomar una decisión… o simplemente que les escuche porque necesitan desahogarse.
DECENAS a diario y te aseguro que todas las semanas me guardo unas horas de mi tiempo para contestar al máximo de personas que puedo.
¿Y sabes qué porcentaje de esa gente me responde de vuelta con un simple gracias? menos de la mitad.
Y te voy a contar un secreto:
Yo he llegado a REGALAR mis programas a gente con situaciones económicamente complicadas. De hecho, confieso que en absolutamente todas las ediciones de mis programas, al menos una, dos o tres personas lo han hecho GRATIS.
¿Y sabes qué? que lo que te dan gratis, no lo aprecias… y no te lo curras porque no tienes nada que perder. Comprobado. Creo que a buen entendedor… no hace falta que te diga más.
Un fuerte abrazo y espero que nos sigamos leyendo!!!
Qué razón tienes con todo lo que expones en el post. Pero, especialmente me ha «tocado» esta respuesta que has dado al comentario de Lau. Personalmente, recibo consultas decorativas por mail de seguidoras a las que trato de responder (lo cual te lleva un tiempo considerable que entregas a otros gratuitamente y que quitas a tu bolsillo, del que comes, y a los tuyos, a los que te debes en corazón y alma cada día). Yo no tengo tanto volumen de consultas como tu pero puedo confirmar lo que comentas: en mi caso ni un 2% me han respondido con un simple gracias. Y es algo que me llama la atención, me cuesta entender y me molesta especialmente. Y más cuando esos servicios de consejo tienen un coste publicado más que económico y asumible. Pero reconozco que yo no me he atrevido nunca a expresarlo en un post cómo tu lo has hecho. Enhorabuena por decir las cosas cono son.
Hola María Luisa, como siempre muy bueno, yo diría que el mejor. Un abrazo
Muchas gracias por tus generosas palabras, Mati!
Coincido con Rodolfo en que es tu mejor post sin duda…por lo menos de los últimos 5 0 tuyos que he leído ;-)… y me duelen los ojos cada vez que leo un post más «edulcorado, mindfulnessero y automotivante» de los que pululan por ahí. Por ello, las dosis de realidad con las que refrescas los inicios de mis mañanas laborales son revitalizantes. No me arrastro sobre cristales rotos ni camino sobre ascuas al rojo vivo y me encanta mi trabajo… por eso valoro mucho más lo que tú haces y lo que tienes. Siempre para delante… mi enhorabuena.
Te agradezco mucho, Patricia. Y me llena de orgullo que me leas cuando eres de las personas que tienes trabajo y que además te gusta, ¡ole!
Pues seguiré trabajando para revitalizar tus mañanas. Gracias de corazón por pasarte por aquí y dejarme tu comentario.
Un abrazo enorme!
Coincido en muchas de las cosas de las que dices pero hoy solo quiero comentar para tratar de contribuir a tu firmeza y constancia frente a ataques, insultos y demás muestras de desconsideración, tan habituales en la red como en nuestro entorno social. No les dediques ni un minuto. De hecho esa es mi pregunta en tu caso y en muchos otros, ¿ De dónde sacan estas personas el tiempo para molestar a los demás, para juzagarlos y ofenderlos? Me tiene sorprendido, con todo lo que hay que hacer desde que uno se levanta 😉
Perdona por la extensión. Solo quería decirte que, como he dicho alguna que otra vez, tienes una propuesta excelente.
¡¡ Ánimo !!
Es una fantástica pregunta aunque dudo que alguien se atreva a contestar. Por desgracia lo encontramos por todas partes y en todos los ámbitos de la vida.
La pena es toda la gente que abandonará o que no emprenderá el camino por el miedo a encontrarse eso. Por el miedo a lo que los demás pensarán e incluso dirán de ellos.
Aprecio mucho tu comentario y tus ánimos. De todos modos, mi mensaje no es tanto para recibir ánimos yo, sino para darle un cariñoso empujón a todo el que de boca dice «quiero» y tanto se queja, pero no hace NADA por cambiarlo.
Un placer tenerte por aquí, espero que me sigas regalando tus palabras 🙂
Muy bueno como siempre, María Luisa
Aunque seguramente a más de uno le resultará recalcitrante lo que dices, sobre todo porque la norma es que estamos acostumbrados a que nos sirvan la comida medio masticada, para no tener que hacer el esfuerzo completo.
Lo más duro de todo, María Luisa, es el camino. Y como bien lo dices, eso nadie te lo cuenta. Esa montaña rusa emocional en la que hay días en que provoca mandarlo todo al carajo, eso nadie te lo cuenta en su justa realidad.
Sin embargo, hay que mantener siempre el positivismo y yo encuentro mucha energía en disfrutar a mis hijos todo el tiempo que puedo, incluso cuando eso significa dejar de hacer lo que estoy haciendo para ayudar al menor que está atascado en una tarea de matemáticas.
Por ello, el único regaño que te hago hoy es el de tu pequeña de 6 años: NO HAY NADA EN EL MUNDO QUE SEA MÁS GRANDE QUE ELLOS, por lo que cada minuto, cada segundo que puedas dedicarles, especialmente ahora que son pequeños y vulnerables, vale muchísimo más que cualquier cliente que puedas enganchar.
Duro de tragar, pero cierto como que el Sol estará de vuelta mañana para iluminarte el día.
Un beso grande.
Gracias por tu comentario, Joel. Y gracias por tu preocupación por mi pitufa 😉
Aunque no puedo dedicarle tanto tiempo como otras madres, en cambio está aprendiendo con mi ejemplo que cuando quieres algo, tienes que esforzarte por conseguirlo. Que no te caen las cosas regaladas del cielo. Que el esfuerzo tiene recompensa. Que vale la pena luchar por tus sueños. Ella sabe que el tiempo que no paso con ella, estoy dedicándolo a ayudar a otras personas que me necesitan. Ella sabe lo importante que es luchar por dedicarte a algo que te llena y te hace sentir orgulloso y satisfecho. Todo esto, para mí (cada uno es libre de ser padre y transmitir a sus hijos lo que considere) son aprendizajes esenciales en la vida y sólo los adquieres de esta manera: con el ejemplo.
Eso no obsta para que cada vez que tengo que decirle que no puedo jugar con ella, se me rompa un poco el corazón. Que las emociones no entienden de lógica… 😉
Gracias por el apoyo y por tus palabras. Y enhorabuena por ese fantástico libro!!!!!!
Aloha!
Hace un tiempo tuve la fortuna de conocer a un conocido ex futbolista, muy famoso en su momento, y que ahora trabaja como periodista deportivo, entre otras cosas. Y explicaba que la gente que lo admiraba y, sobre todo, envidiaba, no sabía ni la mitad de la mitad de sus padecimientos, a saber: insultos (de los hooligans contrarios), amenazas, descrédito, mala prensa, periodistas ‘enemigos’ que lo chantajeaban para decir esto o lo otro… y un largo etcétera. ‘Es el precio de la fama y el éxito’, me decía.
Tres cuartas partes de lo mismo para cualquiera que desee (o logre) sobrevivir en esta sociedad alienada, que se destaque un pelín, que diga algo ‘políticamente incorrecto’, que sobresalga de la media, que intente asomar la cabeza de entre tanta mediocridad impuesta. Los padecimientos son múltiples, por ello nadie quiere herirse con cristales rotos, nadie quiere afrontar el duro camino del sacrificio, nadie goza con el sufrimiento que supone elevarse por sobre la media. Por eso hay pocos que lo consiguen. Y aquí cito a André Agassi, el celebérrimo tenista, cuando decía que se levantaba a entrenar a las 6:30h cada día, aun en Navidad y Año Nuevo…
Por último, y perdón la parrafada, aunque es lógico que limites tu exposición pública (y privada), no pierdo la esperanza algún día de hablar contigo ;-). Tu último programa debe ser la hostia, seguro, y tal vez nos encontremos en él más adelante, pero hasta entonces, no desfallezcas ni cedas, solo con que ayudes a una persona a mejorar su vida, habrá valido la pena tanto esfuerzo, tanta noche en vela, tanto altibajo vital. Luego, solo el destino posee el poder de juzgar.
Un saludo,
Mariano
Lo nuestro es un amor imposible 😉
Me encantan los ejemplos que has compartido. Evidentemente estoy a años luz de esos casos, pero en el camino todos tenemos que pasar por nuestros propios cristales, y te aseguro que en mi caso no hablo de ello desde una perspectiva victimista ni para dar pena, simplemente constato que es lo que ocurre.
Sorprendentemente, todo este cristal me están mostrando lados de mí misma que desconocía. Y eso es bueno.
Un abrazo!
Hola María Luisa,
Al leerte no he podido evitar acordarme de esto:
«Hace poco oí decir a un conocido directivo la frase «Sólo Dios y yo sabemos lo que he tenido que trabajar para tener la suerte que tengo». Y es verdad. No niego que la suerte pueda influir, ya que a veces hay que estar en el lugar adecuado en el momento apropiado, pero la mayor parte de las veces lo que hay detrás de estos casos de éxito fuera de lo común es muchísimo trabajo, un enorme foco y mucha lucha».
Extraido de «Caminar sobre ascuas» un artículo escrito por José Manuel Alarcón, un profesional al que respeto profundamente.
Remitiéndome al refranero popualar, todo lo que puedo decirte es… «a palabras necias, oídos sordos». Y mucho, mucho ánimo.
Buenísima cita y me ha encantado el artículo.
Mil gracias por mostrármelo, ya me he hecho follower 🙂
Aprecio mucho tu comentario. Un abrazo grande!
Tu mejor post sin duda….animo¡¡
Gracias!!
Hola María Luisa:
Cuando se escribe con el corazón, las frases salen sinceras y verdaderas. Y a ti te han salido en uno de los mejores post que te he leído.
Es cierto: la gente no quiere escuchar cierto tipo de cosas. Prefieren seguir a gurús del optimismo que les dicen lo mismo una y otra vez. Sé de tipos que les siguen allá donde van para escuchar… ¡siempre lo mismo!
Te voy a contar algo que yo utilizo…y no veas las caras que muchos ponen cuando se lo lanzo a la cara (las mayúsculas son para resaltar, no para gritar)
Les digo…
«Déjame que te diga algo: es muy probable que te vuelva a pasar (que te despidan) …salvo que decidas que no vas a trabajar para otros.
En cualquier caso, algo es tan seguro como la muerte: que te vas a ir de la empresa. Eso es SEGURO. El CUÁNDO, el CÓMO y el PARA QUÉ es lo que no sabes.
En el mejor de los casos, sería:
• CUÁNDO: CUANDO TE JUBILES
• CÓMO: CON UNA FIESTA DE DESPEDIDA
• PARA QUÉ: PARA DISFRUTAR DE LA VIDA
Pero si piensas que pueda darse lo siguiente:
• CÓMO: DESPEDIDO
• CUÁNDO: CUANDO LES DÉ LA GANA:
• PARA QUÉ: PARA BUSCAR TRABAJO DE NUEVO…PARA QUEDARTE EN EL PARO, PARA TENER DE NUEVO MIEDO AL FUTURO, ETC
Si crees que esta última situación puede darse, empieza a pensar en diseñar TÚ tus propios «CÓMO, CUÁNDO y PARA QUÉ»…U OTROS LO DISEÑARÁN POR TI» Y da igual que trabajes por cuenta propia o ajena»
Claro, hay gente que pone los ojos como platos cuando se lo digo. Seguro que algunso de ellos son de los que te denigran. A ti y a tu trabajo.
Piensa como el clásico: «LADRAN, LUEGO CABALGAMOS»
Un fuerte abrazo
Alfredo Muñoz Quiles
Gerente de Carreras Profesionales
BUENÍSIMO, Alfredo. Duro, claro que sí, pero mucho mejor ser consciente y tomar el control lo antes posible.
Dejar nuestra vida, nuestro futuro, nuestra carrera, nuestro sustento totalmente en manos del libre albedrío del jefe de turno es una LOCURA en este momento.
Y creo que ya lo he publicitado bastante, pero es que esa es la esencia de mi programa!!! es que todo profesional que se preocupe por su futuro, que quiera tener algo seguro, lo único que hay seguro en este momento es que vas a tener que buscar trabajo antes o después.
La volatilidad del mercado, de las empresas, de los resultados, del jefe, del de recursos humanos… esa nos afecta a todos. Pues hay que tejerse una red sobre la que poder caer sin rompernos todo cuando nos empujen.
Again: ese es el sentido de mi programa.
Caray, así se las ponían a Felipe II 😉
Mil gracias por compartir, Alfredo.
Por cierto, que sé que te debo una respuesta. Que no me oiga Mariano que te diría que esperes sentado, porque el pobre lleva esperando a quedar conmigo como medio año… !!!!!
Verdad verdadera lo que cuento en el post, como ves!!!
Espero tener el honor de seguir leyendo tus líneas aquí en mi ciber-casa.
Un abrazo!!!
Mi querida M. Luisa,
Los perros ladran a los que cabalgan . La gente es perezosa buscar y luchar por lo que a uno le apasiona, requiere esfuerzo, mucho esfuerzo. La gente se cree que le vas a vender una píldora y si se la toman todo cambia. Si fuera así de fácil….no habría dificultades. Sigue así, eres un ejemplo a seguir. Eres muy motivadora. No te contrato porque no tengo presupuesto ahora. Pero lo haré en cuanto lo tenga, Un afectuoso saludo